Cascos 

Cascos de Bicicleta

El casco de bicicleta es, sin duda, el cinturón de seguridad de todo ciclista, independientemente de la modalidad que practique (salvo spinning, que no requiere de su uso) y del tiempo que vaya a estar practicándolo. Así pues, nadie debe de salir a la calle sin su casco siempre que vaya a montar en bicicleta.

El casco de bicicleta no puede evitar que nos caigamos o que suframos un accidente, pero sí que el accidente o caída que tengamos no sea tan grave como podría ser de no llevarlo. Pero, claro, a la hora de elegir el caso de bicicleta no podemos elegir cualquiera, sino que debemos de escoger aquel que mejor responda ante nuestras necesidades. En JS Bike, contamos con una gran variedad de cascos de bicicleta para que el ciclista encuentre aquel casco que mejor se adapte a sus necesidades y su fisonomía.

Características de los cascos de bicicleta

• Buen ajuste: En primer lugar, debemos escoger el casco de bicicleta que mejor se adapte a la forma y tamaño de nuestra cabeza. Es importante que el casco de bicicleta se ajuste correctamente y que no quede ni muy apretado ni muy holgado. Que el casco cuente además con un  buen sistema de sujeción aumentará la seguridad del mismo, ya que permitirá que se mantenga en su sitio en el caso de sufrir alguna caída.

• Cómodo: Es imprescindible que el casco elegido para practicar ciclismo sea cómodo. Si vamos a pasar mucho tiempo montando en bicicleta, será necesario que contemos con accesorios que nos ofrezcan confort y comodidad. Por eso, es necesario  comprar un casco que tenga un buen almohadillado interior. Así también hay que comprobar que las almohadillas interiores del casco sean de nuestro agrado y no resulten molestas.

• Específico para modalidad: En segundo lugar tendremos que escoger el casco según el tipo de modalidad de ciclismo que practique la persona que vaya a adquirir el casco de bicicleta en cuestión. A pesar de ello es cierto que hay ciertas características que son comunes a todos los cascos, entre las mismas cabe destacar las siguientes: ligero, transpirable y que esté homologado. 

• Ligero: Los cascos de bicicleta están hechos normalmente de materiales livianos y resistentes. No son tan pesados como otro tipo de cascos ya que los riesgos que implica la actividad ciclista es menor que la de otras actividades que requieren llevar casco. Es importante que los cascos de ciclismo sean lo más ligeros posible para evitar pesos innecesarios y  posteriores molestias en la cabeza y cuello.

• Aerodinámico: La forma de los cascos específicos para montar en bicicleta suelen tener una forma aerodinámica, para que no suponga un impedimento y un freno a la hora de practicar ciclismo. La forma se adapta a la cabeza y permite cortar el aire de la forma más adecuada para no perder velocidad.

• Transpirable: Un casco para practicar ciclismo debe ser transpirable para que la cabeza pueda tener ventilación y no se acumule la humedad en el interior del casco. Por ello, los casos de ciclismo tienen ranuras en la superficie para dejar pasar el aire. Es preferible buscar un casco que sea transpirable pero que cuente con una malla protectora anti insectos. La malla anti insectos evitará que entren estos insectos en el interior del casco y perjudiquen al ciclista durante la actividad.

• Homologado: Si vamos a comprar un casco, es muy importante comprobar que esté homologado a la norma europea. Comprando un casco homologado a Europa nos aseguraremos de que cumple con las especificaciones de seguridad necesarias en Europa así como unos mínimos de calidad. Por eso, es importante comprar un casco en una tienda especializada para evitar complicaciones y asegurarnos de que ese casco cumple con la normativa.

Tipos de casco de bicicleta

Una vez entendidas estas cualidades generales para los cascos de bicicleta, será necesario buscar un casco que se adapte a las necesidades  específicas de cada ciclista. Hay que elegir un casco que sea adecuado para la modalidad de ciclismo que vamos a practicar. Entre las modalidades generales de casco podemos encontrar las siguientes: cascos multiuso, cascos MTB y cascos para ciclismo de carretera.

Cascos multiuso

Los cascos multiuso son ideales para principiantes o para personas que van a practicar ciclismo por diversión y no de forma profesional. Además, los cascos multiuso son ideales para aquellos que van a usar la bicicleta en ciudad o para desplazamientos cortos. Son cascos genéricos y por tanto no están fabricados específicamente para ninguna de las modalidades. En cualquier caso, tienen ventajas porque para personas que aún no tienen muy clara la modalidad de ciclismo que van a practicar  o para principiantes son cascos muy económicos.

Cascos MTB

Si la modalidad que vamos a practicar es de montaña entonces tendremos que elegir un casco MTB. Los cascos para ciclismo de montaña son más resistentes ya que hay más posibilidades de sufrir caídas debido a que el terreno suele ser más irregular. Suelen ser más duros y tienen una alta capacidad de transpirabilidad. En el ciclismo de montaña o por el campo, los ciclistas están más expuestos a diferentes condiciones del terreno. Los cascos para modalidades de montaña pueden contar con complementos como viseras para combatir la lluvia, el barro o el sol que son de gran ayuda para poder montar en bicicleta obteniendo una mejor experiencia.

Cascos carretera

Los cascos específicos para ciclismo de carretera suelen ser los más estilizados y aerodinámicos, dadas las características y necesidades del ciclismo en ruta. Practicar ciclismo por carretera suele implicar alcanzar altas velocidades y suele ser un tipo de ciclismo más profesional.  Que el casco tenga un buen sistema aerodinámico permitirá mejorar los tiempos y la calidad del ciclismo. Es fundamental que el casco de carretera cuente con una buena respiración y transpirabilidad ya que los que practican esta modalidad de ciclismo en ruta, pasan mucho tiempo en la carretera. En los cascos para carretera, el diseño es el factor principal que determina el precio de dicho casco. 

Puede que esté muy manido, pero lo cierto es que el caso es, sin duda, el cinturón de seguridad de todo ciclista, independientemente de la modalidad que practique (salvo spinning, que no requiere de su uso) y del rato que vaya a estar practicándolo. Así pues, nadie debe de salir sin su casco siempre que vaya a andar en bicicleta. El casco de bicicleta no puede evitar que nos caigamos o que suframos un accidente, pero sí que el accidente que tengamos no sea tan grave como podría ser de no llevarlo. Pero, claro, a la hora de elegir el caso de bicicleta no podemos elegir cualquiera, sino que debemos de escoger, en primer lugar, el que mejor se adapte a nuestra cabeza y en segundo lugar y no menos importante, al tipo de modalidad de ciclismo que practique la persona que lo vaya a adquirir. A pesar de ello es cierto que hay ciertas características que son comunes a todos los cascos, entre las mismas cabe destacar las siguientes: ligero, transpirable y que esté homologado.